Por Mauricio Salazar Sandoval, licenciado en Trabajo Social

El concepto de Estado Nacional Asistencial, planteado por Ulrich Beck, analiza los estados, su precariedad, ante el trabajo y la protección social, acompañada de desigualdades del mercado. Generando así dependencia, no necesitando de la militarización para el control de la población, lo que es remplazado por el paternalismo y clientelismo, manteniendo el lineamiento y control, e incrementando el circulo de pobreza. Al mismo tiempo, hace creer a las personas que son usuarios de una eterna compasión en vez de sujetos de derecho capaces de construir movilidad social.

En Chile se gesta a través de paternalismo y clientelismo en servicios públicos, en especial municipios, quienes en vez de promover la educación, la participación, asociatividad  para objetivos comunes, se concentran en simples entregas. De esta forma, el trabajo es más sencillo que el esfuerzo de gestionar. También ciertas autoridades pueden perpetrarse en el poder décadas, haciendo campañas en base a entregas de diversas cosas materiales, distorsionando al mismo tiempo el rol del dirigente social, quien en vez de ser un aliado estratégico para sostener mejoras en su territorio se trasforma en un agente demandante.

¿Qué podemos hacer? Ver la dignidad de la persona, la imagen y semejanza de Dios. Ser éticos para trabajar. Gestionar, capacitaciones, telecentros, nivelación de estudios, comités de vivienda, comunicarnos. Ojala se avance a estado social de derechos y de bienestar. Y, si se amerita asistamos, o ayudemos.